Los funerales de la mamá grande –
Gabriel García Márquez.
La
vez pasada tuve la oportunidad de hablarles sobre “La Mala Hora”, tercera
novela del escritor colombiano Gabriel García M. Cuyo contenido comenté estaba
lleno de una gran crítica política y social que rodea a un pueblo lleno de
habitantes cansados de la cotidianidad y la negligencia. En esta ocasión, vengo
a recomendar una obra del mismo autor, pero muy diferente a la anteriormente
mencionada. Se trata de “Los funerales de la Mamá Grande”.
A pesar que los eventos de esta obra sucedan en
el mismo entorno, con casi los mismos personajes de La Mala Hora, se trata de
una obra completamente distinta. Tenemos un conjunto de crónicas que hablan
sobre acontecimientos ocurridos a los habitantes de este pueblo -Que
aparentemente se trata de Macondo, el famoso Macondo de Cien Años De Soledad,
cosa que no se había revelado en la anterior obra pero que se había mencionado
como para dejar una puerta abierta a la suposición-. Hablamos de un total de
ocho crónicas con temas y personajes distintos. Tenemos a una madre que llega
al pueblo para saber sobre el paradero del cadáver de su hijo; una conversación
con el alcalde y el dentista, que previamente se había mencionado en la anterior
obra; Un hombre que, a mi parecer, se trata del juez antes de hacerse juez, que
tiene que robar para sustentar a su pareja embarazada, mientras esta última se
trata de oponer a sus hazañas; una joven que se pierde su comunión; una señora
que pierde a su esposo; un hombre que construye la jaula más bella del mundo
para un niño malcriado; y en la crónica final tenemos a La mamá Grande. Una
mujer importante en el pueblo y en el país. Señora que vivió unos cien años y
que mandó con puño bravo en el pueblo. Vemos un conjunto de funerales en su
honor, con personalidades exquisitas del mundo, incluyendo al presidente de
aquel país y al Sumo Pontífice.
En esta última crónica, se siente la espera
del estilo de narración que nos demuestra nuestro querido Gabo en Cien Años de
soledad. (Lamento si menciono mucho esta obra, pero me resulta imposible hablar
de La mala hora y de Los funerales de La mamá grande sin recalcarla, ya que resultan
ser los primeros pasos antes de que el autor tocase el tema de esta obra
maestra mundial de la literatura.) Su estilo de narración en todos los eventos
ocurridos hasta los momentos en estas dos obras a las que hago reseña se mantiene
hasta llegar a la crónica final de La Mamá Grande. Al leer sus líneas finales
se siente la madurez en su escritura, manteniendo el estilo coloquial de narrar
todo a su alrededor, estilo que al parecer nunca pierde y que envuelve al
lector en los personajes y mundos que crea.
Los Funerales de la mamá grande resulta ser
una obra ligera, de lectura rápida, mucho más digerible que La Mala Hora,
aunque con menos lecciones que aprender. Gabriel García Márquez demuestra lo
bueno que es desarrollando personajes, como siempre. Recomiendo esta lectura corta, ligera y sencilla (con excepción la crónica final, no tan simple y sencilla como las otras, la cual se extiende
en detalles magníficos sobre la vida de una mujer que fue amada y odiada por muchos).
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